El 15-M despierta viejas pasiones.

Acción de Black Mask en Wall Street en los 

años setenta.Ben Morea,

el activista que lideró la lucha anarquista de los años setenta en Nueva York, viaja a España para conocer el 15-M.

Ben Morea, de quien no se conoce fotografía en los

últimos 30 años, no hubiera pasado de adolescente problemático
y drogadicto prematuro si en los

años cincuenta no hubiera contactado con la escena beatnik, el arte y su proyección política.
En la década siguiente

impulsó el grupo Black Mask, inspirado en el dadaísmo, el surrealismo y los

anarquistas españoles de Buenaventura Durruti, para organizar manifestaciones frente al MoMA y Wall Street.

«Ni somos artistas ni somos anti-artistas. Somos creativos y

revolucionarios que se dedican a construir una sociedad nueva, pero tenemos que destruir el travestismo. ¿Qué arte

reemplaza a los cuerpos ardiendo y las mentes muertas que la sociedad está creando?», preguntaba Black Mask en 1967. «Vengo

a España porque me han invitado, conocer gente distinta siempre es interesante. Puedo aportar mis ideas, pero nunca diré a nadie lo que tiene que hacer o cómo debe pensar«, afirmaba ayer el Morea del

año 2011.

Veterano de la lucha anarquista en EEUU, el pensador y activista político

Ben Morea acaba de cumplir 70 años con un regreso inesperado. Este revolucionario urbano que lideró el movimiento The

Family, popularmente conocido como Up Against The Wall Motherfucker, rompe ahora tres décadas de total ostracismo para

asistir en directo a la ola de movilizaciones sociales que sacude Europa y el norte de África. Atiende a Público

desde Oporto, primera parada de una gira europea que el viernes llegará a Madrid. «No soy consejero ni asesor para nadie.

Podemos hablar de historia, de la historia que he vivido, pero no esperen consejos«,

advierte este veterano defensor de la conciencia de clase. Y empieza a hablar de una historia que merece la pena ser

recordada.

Los tiempos están cambiando

Morea, que, antes de retirarse a una vida eremita, inspiró a Valerie

Solanas el intento de asesinato de Andy Warhol en 1968, habla sin tapujos del «optimismo» que le ha insuflado la rebelión

ciudadana de los indignados. «Estoy encantado con lo que está ocurriendo. Demuestra

que la juventud se acerca al mundo actual con mayor sentido. Es la gente joven la que quiere encontrar el sentido real de

las cosas», afirma el activista. «Vivimos un momento para el cambio, para los cambios de todo tipo: en los comportamientos

políticos y económicos, pero también de índole social, sexual, cultural», explica Morea, que está convencido de que esta

revolución callejera tendrá recorrido. «Por supuesto. Estoy convencido de que habrá resultados efectivos. Claro que tendrá

consecuencias. Ahora todo está empezando, pero tendrá un recorrido más largo de lo que algunos imaginan. Estoy interesado en

este principio, y ahora no pienso tanto en los resultados finales», asegura antes de recomendar lo siguiente: «Si toda la

gente que está en las calles sabe lo que quiere, deben hacerlo o al menos seguir intentándolo. Y creo que saben bastante bien qué quieren en estos momentos«, advierte Ben Morea.

Perro viejo de la lucha callejera (en 1968 dirigió la ocupación de la Universidad de Columbia y

saboteó una «gala cultural burguesa» tirando basura a la fuente del Lincoln Center de Nueva York), Morea reconoce que la

actual ola de protestas le sorprendió. «Nadie esperaba esta crisis y aquí está. Pensaba que ya no había ninguna posibilidad

de que algo así ocurriera. Quizá esperaba algo nuevo en el norte de África, pero no en Europa. Pero no soy ningún profeta.

¿Quién iba a decir en 1917 que todo lo que vino después sería posible?», analiza. Y la cosa, avisa, va en serio. «Aquellos

que saben o creen saber que esto sólo es un juego son de quienes debemos preocuparnos. Y todos los que quieren, todos los

que queremos que no se repita un final decepcionante, todos los que creemos que es un momento para el cambio, debemos

seguir trabajando», añade Morea, que se inspiró en el poeta negro Amiri Baraka para alentar la revolución urbana al grito

«¡Up Against The Wall Motherfucker!» y se alió con los grupos de rock MC5 y Canned Heat para amplificar el ruido.
El 15-M cogió al poder con el paso cambiado en España. ¿También en EEUU? «Algunos están

preocupados y otros incluso están contentos por lo que está pasando en Europa y África, pero son minoría. La mayoría de los

americanos no entienden qué está ocurriendo», asegura
Morea también tiene sus propias recetas para la situación actual

en Europa. «Yo diría que la Unión Europea no es buena opción para recomendar a nadie», dice el activista, pese a que muchos

de los países que antes estaban en la órbita soviética ven ahora la UE como la solución a todos sus males. «La UE no es el

futuro soñado. Nunca he creído en el Estado, creo más en la autonomía del individuo y en la autonomía de colectivos de

individuos organizados. Es mejor potenciar la autonomía en lugar de alentar la obligación de estar unidos. Que haya países

que vean la UE como solución a todos sus males no me gusta. No me gustan las uniones forzadas, y ya se está viendo que la

UE no ha sido capaz de responder a las crisis de sus miembros». Morea, por tanto, cree que hay margen para la acción

alternativa. «Si lo que está ocurriendo no te convence, sólo tienes que mirar todo lo malo que nos rodea. Siempre hay alguna

forma de intentarlo. Ahora hay que seguir plantando cara«.

Publicado en

diario Publico.