Lamentamos no poder anunciar la desconvocatoria de la huelga en Mediapro. Tampoco podemos comunicar un aplazamiento, como han decidido hacer otros sindicatos.
La mediación de hoy ha confirmado lo que venimos advirtiendo tras las tres reuniones previas con las empresas: HBS no tiene la menor intención de subrogar al conjunto del personal necesario para producir los partidos de Primera y Segunda División. Han manifestado abiertamente que subrogarán únicamente a quienes, según su interpretación restrictiva del artículo 46 del Convenio del Sector Audiovisual, están obligados a subrogar. Y a quien no le parezca bien, que acuda a los tribunales. Pero para entonces, el
daño ya estará hecho.
Tras la ruptura de la mediación conjunta con CCOO y UGT — provocada por divergencias durante las negociaciones— se levantaron de la mesa y decidieron continuar por separado antes de hacer siquiera ni una propuesta a las empresas.
Una vez la mediación era solo de CGT, buscamos un compromiso firme por parte de Mediapro: garantías reales para que ningún trabajador o trabajadora no subrogable se quede sin trabajo en un futuro.Propusimos fórmulas viables. Nos encontramos con negativas sistemáticas.
Fuimos rebajando nuestras líneas rojas hasta lo imprescindible: que se dejara constancia por escrito en el acta del compromiso de Mediapro a proteger el empleo y a iniciar mañana mismo — miércoles 14— una mesa de negociación para firmar un acuerdo con cláusulas específicas de salvaguarda laboral. ¿La respuesta? Nos pidieron esperar hasta el viernes para traernos una propuesta. Y sinceramente: estamos hartos de promesas vacías y dilaciones interesadas.
Desde CGT lo decimos con claridad: si realmente hay voluntad de diálogo, estaremos dispuestos a sentarnos mañana y cuando haga falta. Pero no vamos a ceder más, y menos aún cuando, desde la primera reunión celebrada el martes 6 de mayo, no se nos ha ofrecido absolutamente nada de lo que venimos reclamando.
En cada una de las reuniones hemos exigido garantías concretas, y en todas hemos recibido evasivas, desplantes y desinterés absoluto por parte de las empresas implicadas. Ni siquiera entre ellas han mostrado la menor intención de coordinarse para buscar una solución.
Nuestra exigencia no es desmesurada: queremos negociar una garantía firme de que ningún trabajador o trabajadora que no sea subrogado pierda su empleo en los próximos años. Y esa negociación debía comenzar ya.
Con este panorama, desde CGT no desconvocamos ni aplazamos la huelga. Y utilizaremos todas las herramientas legales y sindicales a nuestro alcance para defender con firmeza nuestro derecho a huelga y la dignidad de la plantilla.
Un abrazo solidario,
Adrián Marín
Delegado Sección Sindical CGT Eumovil
